La historia de Cordovas es la de unos perseguidores del rock n’roll, perseverando en una búsqueda no solo de una idea platónica de su sonido espontáneo, sino también de una verdad superior sobre nuestra experiencia como humanos. Un clasicismo místico ha guiado a la banda durante sus dimes y diretes, hasta llegar a ‘The Rose of Aces’ (2023), el resultado del largo y extraño viaje de su líder, Joe Firstman, que llegó a Los Angeles a comienzos de los dosmiles para ganarse la vida como compositor de canciones. Consiguió un contrato con el sello Atlantic y lanzar su primer disco, que presentó llegando a abrir conciertos para Sheryl Crow y Willie Nelson, antes de entrar en un bucle de autosabotaje personal. Casi diez años más tarde, Firstman se dio cuenta que funcionaba mejor con una banda a su alrededor. Y encontró al guitarrista Lucca Soria, al que describe como “un soldado que entiende lo que mejor hago”: Así nacieron Cordovas, que consolidarían la visión de Firstman. Todas esas duras lecciones de vida desembocan ahora en ‘The Rose of Aces’, el tercer trabajo del grupo.
“¿Cuántas veces la música te salvó la vida?”, pregunta en ‘Fallen Angels Of Rock n’ Roll’, que abre el disco, trazando una historia del rock n’ roll desde Memphis a Muscle Shoals en una gloriosa colisión de folk, country, groove rocanrolero y poesía salvaje. Siguen empeñados en trabajar esas armonías enraizadas en el twang del country cósmico, como una versión atemporal del sonido que dibujaran Grateful Dead o los Allman Brothers en las fronteras musicales entre el rock, el country y el folk amplificado, sin despreciar el boogie-woogie heredado de The Band, los fondos de pedal Steel y las notas de blues. Todo un universo nacido en la comunidad artística de Todos Santos, en la península mexicana de Baja California, donde Firstman reside y pasa el tiempo abocetando docenas de canciones y empapándose de literatura mitológica y espiritual. De ahí que la influencia fronteriza de México también se deje notar, especialmente en el cierre del álbum junto a La Marisoul, “Somos Iguales”, puro folclore latino.
Cordovas son una banda única que condensa todo el amplio horizonte de la tradición americana de hacer canciones. Música americana fronteriza pero sin fronteras.